El mundialito de los pobres que se juega en Cuenca es uno de los referentes dignos de replicarse y lo llevaremos a las parroquias rurales para que la práctica deportiva se amplíe y crezca.
El mundialito de las parroquias permitirá reactivar la economía fomentando el indoor fútbol y el ecuavóley en la ruralidad. Esta iniciativa además apoyará al turismo rural y a decenas de emprendedores que necesitan de trabajo, porque el deporte será parte fundamental de nuestro plan de desarrollo rural.