29.04.2025
La tradición de fe católica a través del Pase del Niño Viajero, considerado el “Quinto Río de Cuenca” tuvo hoy su máxima expresión con la presencia de miles de creyentes que participaron en la procesión y otros tantos que la presenciaron.
El alcalde, Cristian Zamora en su mensaje a cuencanos y visitantes hizo un llamado a mantener a Cuenca como una ciudad que irradia paz; también expresó su deseo de felicidad para todos los hogares e invitó a la ciudadanía a disfrutar de los espacios públicos en esta temporada.
El Pase del Niño Viajero inició con una ecucaristía presidida por el cardenal Luis Cabrera quien dirigió un mensaje de paz y solidaridad con el prójimo.
El Pase del Niño Viajero es la manifestación de religiosidad popular de mayor importancia en Cuenca y esta vez la procesión recorrió la calle Simón Bolívar, desde el parque de San Sebastián hasta el parque de San Blas.
Los priostes fueron la Comunidad Salesiana, los Feriantes de El Arenal y la III División de Ejército Tarqui, en tanto que la organización la lideró la Curia Arquidiocesana de Cuenca, con la participación de la Comunidad de Madres del Monasterio del Carmen de la Asunción y el grupo “Hermano Miguel”.
Además del componente religioso, esta festividad reflejó un profundo valor cultural, social, turístico y simbólico con la participación de diversos sectores como artesanos, mantenedoras, priostes, músicos, danzantes, revestidos, migrantes, entre otros.