Un claro ejemplo de violencia de género es que tu pareja controle tu forma de vestir, tu dinero, revise tu teléfono celular, se meta en tus redes sociales.
Puede ignorar o despreciar lo que sientes y piensas con frecuencia.
Controlarte económicamente generando dependencia económica, te da el dinero justo para comprar comida para que no dispongas de dinero para gastos o salidas.