Patrimonio cultural tangible
Patrimonio cultural tangible
En la vieja ciudad existen centenares de edificaciones catalogadas como bienes patrimoniales arquitectónicos, entre las cuales se encuentran las iglesias o templos, conventos y monasterios, museos, casas particulares y edificaciones públicas o privadas de gran valor artístico y cultural.
A la vez, centenares de obras de arte en esculturas, tallas, pintura, orfebrería, libros, documentos y otros objetos que tienen relación con los períodos de la Colonia, Independencia y la República son bienes patrimoniales que requieren ser conservados y se encuentran localizados en múltiples locales y museos.
Pero también, son parte del Patrimonio Cultural Tangible los vestigios arqueológicos de Pumapungo y Todos los Santos del período prehispánico de Cuenca, creados a lo largo de la historia por los pueblos aborígenes. Se trata de elementos que, investigados e interpretados científicamente por los arqueólogos, en equipo con otros científicos, nos permiten conocer innumerables aspectos de las culturas cañari e inca que, junto con la hispana, han definido a la morlaquía como un hecho singular de la cultura ecuatoriana.
Convencidos de que el Patrimonio Tangible va más allá de la simple conservación de estos monumentos arquitectónicos, la I. Municipalidad de Cuenca, a través de la Comisión de Gestión Ambiental, ha convocado un Concurso de árboles patrimoniales para que la ciudadanía y sus instituciones se sientan como partes activas de la defensa de los bienes patrimoniales y candidaticen a determinadas especies de árboles ubicados en espacios públicos y privados que, por sus características especiales de longevidad y originalidad, deben ser declaradas como árboles patrimoniales de la urbe.