Con una carta, las ciudades participantes del III Encuentro Regional de la Organización de las Ciudades del Patrimonio Mundial (OCPM), reunidas en Cuenca, Ecuador, del 26 al 28 de noviembre de 2025, expresaron su compromiso conjunto con la regeneración de los centros históricos a través de la habitabilidad, reconociendo que el patrimonio —material e inmaterial— es un recurso esencial para construir ciudades más resilientes, sostenibles y vivas.

La OCPM es una red internacional creada en 1993, con más de 220 ciudades inscritas en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO, entre las cuales está Cuenca. En esta ocasión se contó con la presencia de 15 delegaciones internacionales de 10 ciudades de Cuba, México, Canadá, Uruguay y la “Atenas del Ecuador” como anfitriona.

Marisol Peñaloza, vicealcaldesa de Cuenca, en delegación del alcalde Cristian Zamora, dijo que estos encuentros ayudan a mejorar, aprender y generar buenas iniciativas. “En estos espacios no solo se reúnen autoridades, sino expertos delegados de ciudades patrimoniales de América Latina y el Caribe, y su foco es la implementación del nuevo proyecto urbano”, señaló.

Con vistas al Nuevo Proyecto Urbano, pero también como prioridad en cada una de sus ciudades, a través de la “Carta de Cuenca” se comprometieron a:

1.    Integrar en la gestión de los centros históricos los cuatro Ejes Estratégicos de manera transversal, mediante el concepto de habitabilidad tal como lo propone la OCPM.
2.    Recuperar la función habitacional y revitalizar la vida urbana en los centros históricos, a través de la implementación de políticas públicas integradas que incluyan la preservación y restauración del patrimonio; vivienda asequible y accesible; infraestructura y servicios básicos; fomento del comercio local y la economía; participación ciudadana y gobernanza; turismo sostenible; y educación y conciencia sobre la importancia del patrimonio cultural.
3.    Fortalecer una gestión urbana y patrimonial integrada, colaborativa y flexible, que articule a las instituciones, propietarios y ciudadanía para mejorar la habitabilidad, la imagen urbana y la sostenibilidad de los centros históricos, mediante una articulación institucional eficaz; programas y herramientas colaborativas con propietarios y ciudadanía; y flexibilización normativa e incentivos para la acción.
4.    Avanzar hacia el reforzamiento de su ente gestor, a través de un acompañamiento técnico-jurídico a la ciudadanía respecto de las intervenciones en sus bienes inmuebles; la inclusión en los Planes de Gestión de un eje jurídico que indique obligaciones, beneficios y corresponsabilidades patrimoniales; y la elaboración y difusión de una normativa clara —sobre conservación, derechos, obligaciones y beneficios— para brindar certeza a la ciudadanía sobre las intervenciones posibles en su patrimonio.

Las ciudades firmantes de la Carta en Cuenca manifestaron su voluntad de contribuir activamente a la elaboración y adopción del Nuevo Proyecto Urbano de la OCPM, que será presentado en Marrakech en 2026.